La estampación es ideal para recrear diseños planos sobre prendas o telas. Según la técnica elegida (estampación con tinta blanca o estampación vinílica), es posible conseguir imágenes a todo color, como fotografías, o dibujos monocromos.
El proceso de estampación pasa por las siguientes fases:
Cuando recibimos un diseño para estampar, evaluamos la calidad y la adecuación del mismo a las necesidades del cliente. Normalmente, si es para vinilo textil, pasamos el diseño a un formato adecuado para la máquina de corte. Si es para serigrafía, elaboramos las pantallas que contendrán el diseño.
Durante la segunda fase se elige el tipo de técnica. En bordados Xutchill trabajamos la estampación con tinta blanca y la estampación con vinilo textil. Depende de cómo sea tu diseño, será más adecuada una u otra.
1. Estampación con tinta blanca. Partimos desde una impresión digital en un papel especial. Luego, por medio de calor y presión, transferimos la tinta a la prenda. Con esta técnica podemos estampar en prendas claras y oscuras e, incluso, hacer diseños en tinta blanca directamente.
2. Estampación con vinilo textil. La estampación vinílica funciona muy bien con diseños sencillos y monocromos. No obstante, en algunos casos, el diseño también puede estamparse a dos colores. ¡Ven a vernos y echa un ojo a nuestro catalogo de tonos, porque ofrece un sinfín de posibilidades!
El vinilo tiene un acabado excepcional y se puede usar tanto en prendas claras como oscuras. Esta técnica requiere de un programa para indicar al plotter de corte cómo hacer el diseño.
La estampación propiamente dicha es la última fase, pero no por ello la menos importante. A través de presión y calor, planchamos las prendas estampando el diseño en el lugar escogido.
Todas las técnicas que usamos tienen total resistencia a los lavados.
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