Entrevista a Marta, el motor de Xutchill: «No somos un taller grande y tampoco queremos serlo, porque queremos que el producto esté muy mimado»
¡Ya es primavera! ¡Y cuánto nos gusta! Empieza la temporada de terracitas, de piscina y de excursiones a la montaña…
En Xutchill estamos tan, tan motivadas, que hemos preparado una súper cuidada selección de productos para nuestra tienda online y, además, nos hemos propuesto un reto: las #entrevistasxutchill, una serie de entrevistas, de mano de nuestra compañera y periodista Irene Díaz, sobre nuestros productos a nuestros clientes más cercanos. Y, para que luego no digan que en casa del herrero cuchillo de palo, Irene ha empezando entrevistando a la propia Marta, el motor de Xutchill. Let’s go!
Para empezar, Marta, quiero que definas con tus propias palabras quién o qué es Xutchill.
Xutchill es un taller bastante jóven y dinámico. Aunque tiene mucha tradición familiar, hace unos seis años mi hermana y yo decidimos darle un cambio, dándole un toque más actual. Desde entonces, intentamos que una técnica tan tradicional como el bordado tenga otras connotaciones más frescas, pero sin perder en ningún momento la esencia artesanal.
¿Y qué hacéis, cómo es vuestro trabajo?
Hacemos sobre todo productos para otros clientes, aunque también tenemos producto propio. Nuestro enfoque principal es que la gente pueda hacer lo que quiera, sacar ese toque divertido que todos llevamos dentro y permitir que el cliente se pueda hacer la ropa y complementos como quiera, a su gusto.
Para conoceros a vosotros parece necesario conocer a vuestro cliente. ¿Quién es vuestro cliente ideal?
Nuestro cliente ideal sería esa persona que tiene un montón de inquietudes, que tiene creatividad y quiere hacer cosas chulas, pero no tiene herramientas y por eso contacta con nosotros para que le echemos una mano.
Tenéis un estilo de diseño muy marcado, tanto en cuanto a los maravillosos productos de vuestra tienda online como en cuanto a vuestra estrategia de comunicación en redes sociales. Me pregunto qué quiere proyectar Xutchill.
Queremos proyectar que somos un taller en el que el cliente puede venir y sentarse con nosotros, para que le asesoremos artísticamente. Queremos proyectar que vamos a dedicar un rato a ver sus proyectos y sus ilusiones, para que le quede tal y cómo tiene en la cabeza. Que vamos a poder guiarle de la mano durante todo el proceso, que vamos a ayudarle a elegir el hilo y la técnica más adecuada y va a acabar con un producto de alta calidad entre sus manos.
Y ahora, la pregunta inevitable. ¿Cómo son vuestros bordados?
Artesanales y frescos. Podemos hacer desde toallas bordadas como las que antes hacían las abuelas con mucho cariño, hasta soluciones más creativas para diseñadores de moda o para gente que quiera innovar y hacer cosas diferentes.
Una de los retos más grandes que tiene el empresario hoy en día es detectar el nicho de mercado.
No somos un taller grande y tampoco queremos serlo, porque queremos que el producto esté muy mimado. Además, estamos en un sitio muy céntrico, como es el centro de Madrid, atendemos a cualquier persona, desde a alguien que quiere hacer un regalo hasta alguien que necesita bordados para los uniformes de su negocio.